Este martes 7 de noviembre hemos celebrado un nuevo encuentro donde los participantes de las dos viviendas del proyecto Mi Casa: Una vida en comunidad han compartido sus éxitos del día a día tras un año y medio dentro del proyecto.
Junto a las y los profesionales de apoyo, las personas de las asociaciones que comparten piso han hablado de las actividades que hacen para contribuir en su comunidad y en sus barrios. Además, en un mural han podido recopilar todos los objetivos de vida que quieren alcanzar para el futuro en su comunidad.
Conectar con la comunidad es el gran reto de este proyecto que, como bien han resaltado los representantes de Plena inclusión, posee una gran incidencia política. Otro de los retos del proyecto es conseguir disfrutar de condiciones de vivienda dignas, como que cada persona tenga una habitación propia y el derecho a la intimidad, así como tener el control de sus vidas para tomar decisiones sobre ellas en el día a día.
La oportunidad de vivir como todas y todos
Desgraciadamente, las personas con discapacidad intelectual y del desarrollo con grandes necesidades de apoyo que viven en residencias, no tienen total libertad para poder tomar decisiones del día a día, ya sea por la estructura de sus residencias o por nuestra falta de formación para escucharlos.
En este contexto, nace ‘Mi Casa. Una vida en comunidad’, un proyecto que propone una nueva vida para las personas con discapacidad intelectual con grandes necesidades de apoyo. La finalidad es que las personas puedan tener el control de sus vidas, vivir en vecindarios de su comunidad y poder participar en ella y contribuir en su desarrollo.
En este proyecto, puesto en marcha por Plena inclusión España en enero 2022, participan siete comunidades autónomas diferentes: Aragón, Canarias, Castilla-La Mancha, Cataluña, Madrid, Extremadura y la Región de Murcia. La duración estimada para su desarrollo es de tres años.
En la Región de Murcia participan nuestras asociaciones Ceom, de Murcia, e Intedis, de Mula. Cada una de ellas cuenta con una vivienda en la comunidad que dispone de profesionales de apoyo para que las personas con discapacidad puedan llevar una vida en comunidad.