La federación Plena inclusión España se une a la celebración del Día Mundial de la Salud Mental denunciando que las personas con discapacidad intelectual que tienen alguna enfermedad mental (entre un 30 y un 60% dentro del colectivo de la discapacidad intelectual) ha sido tradicionalmente invisibilizado y que necesita de recursos y adaptaciones específicos. El hecho de no dotar al sistema sanitario o a sus pacientes de los recursos y adaptaciones que necesitan supone un acto de discriminación hacia la persona que sufre esta enfermedad.
Entre las demandas de la federación se encuentran la priorización de la atención sanitaria a las personas con discapacidad intelectual y trastornos de salud mental, que esta respuesta sea ágil y de calidad para estas personas y sus familias y el aumento de inversión en recursos para estas personas.
Pero atendiendo a la singularidad de estos casos, Plena inclusión también reclama que se fomente el acceso a la información y la participación de las personas y sus familias en la toma de decisiones relativas a su salud mental y que se establezcan planes de formación y capacitación especializada en discapacidad intelectual o del desarrollo en todas las ramas profesionales vinculadas con la salud mental.
Además, el aspecto normativo debe adaptarse a esta realidad a través de creación de protocolos específicos que incluyan casos excepcionales como el de la pandemia de covid-19 y el establecimiento de estrategias estatales y autonómicas referentes a estas personas.
Por todo ello, en Plena inclusión queremos dar a conocer la situación que viven las personas con una discapacidad intelectual o del desarrollo y que sufren un trastorno de salud mental. Un acto con el que esperamos se empiecen a adoptar soluciones para dotar de derechos y aumentar la calidad de vida de estas personas y sus familias.